El estreno de los nuevos bonos soberanos en dólares no fue el esperado. Los títulos resultantes del canje acumularon mayoría de retrocesos durante su primera semana, y ya sin las limitaciones que impone el parking volvieron a mostrarse mayormente en rojo durante la rueda de ayer. Los primeros negocios de este martes, sin embargo, parecen insinuar un cambio de tendencia. Los bonos soberanos en dólares emitidos bajo ley extranjera crecían entre 0,4% y 0,8% y recuperaban así parte del terreno perdido la semana última. De esta manera, se mantienen con rendimientos que oscilan entre 11,5% y 12%.

Mismo comportamiento alcista se observaba para los títulos en dólares de ley local. Allí las mejoras llegaban hasta 1,3%, aunque la tendencia entre dichos bonos no era uniforme y en el tramo medio se mantenían en rojo.

“La caída de los títulos de ayer generó que las Tires cierren dentro de un rango superior en torno al 12% y 12,5% para los títulos de ambas legislaciones, con un diferencial de rendimientos según ley casi inexistente. De esta forma, los rendimientos se alejan de los niveles del inicio de la semana pasada del 10% al 11% y se acercan a los de los bonos “viejos” del 13%”, resumió Portfolio Personal Inversiones (PPI) en un informe.

Ante esta leve mejora de bonos, el riesgo país volvía a ceder terreno. El índice que mide JP Morgan retrocedía 17 unidades y se ubicaba así en 1105 puntos básicos.

Distinto era el panorama, en cambio, para la renta variable local. A contramano de Wall Street, donde los índices de referencia volvían a operar al alza y parecen dejar atrás las correcciones sufridas la semana última, los adrs de las compañías argentinas operaban mayormente a la baja.

Caían hasta 5,4% encabezados por los papeles de Edenor, y seguidos por el Grupo Financiero Galicia y Transportadora de Gas del Sur, que exhibían pérdidas respectivas de 3,4% y 2,7%. En la otra vereda, en cambio, se volvía a destacar la recuperación de Telecom Argentina, que trepaba 3,9%.

En Buenos Aires, en tanto, la tendencia se replicaba. Las acciones de las empresas argentinas también mostraban mayoría de retrocesos en la plaza bursátil local y provocaban una nueva caída del S&P Merval, que cedía otro 1,43%, hasta los 43.978 puntos.